Esa MILLA EXTRA que retiene a un cliente!
- Yira Vermenton
- 9 nov 2016
- 4 Min. de lectura

Anoche durante mi seminario en línea “En busca de lo extraordinario”, le comentaba a los participantes que realmente lo que te hace pasar de lo ordinario a lo extraordinario, es literalmente ese “Extra”, que los que deciden ser ordinarios no están dispuestos a dar.
De manera que ser extraordinario es un tema de elección. Todos y cada uno tenemos dentro la semilla de lo extraordinario, y sólo debemos decidir si queremos hacerla germinar.
A nivel personal, es buscar romper paradigmas, estar dispuestos a ir en contra de la corriente, salirse del área de confort, sorprenderse a uno mismo y a otros dando esa milla extra, cuestionarse el estatus quo, o simplemente salir de lo común, lo normal, lo aburrido, lo establecido y lo cotidiano.
En el entorno empresarial, tener la actitud del que busca lo extraordinario, es un tanto más de lo mismo. Es buscar lo maravilloso, lo increíble, lo inusual. Es enfocarse en estar por encima del promedio y hacer algo especial. Es dar esa milla “extra” (de extraordinario) que retiene a tus clientes.
Justo el sábado pasado tuve una experiencia “EXTRAORDINARIA”, con un colaborador de la empresa Avelino Abreu, que con su actitud fuera de lo común, me retuvo como cliente. Soy una apasionada del buen servicio, y siempre que observo a personas que lo ofrecen, claramente apartándose de lo ordinario, no puedo evitar reconocerlos por su buena actitud. Por eso me place compartirles este testimonio.
Su nombre es Pedro Cruz. Gracias Pedro! Es formidable cuando alguien con actitud y mente dispuesta a lo “Extraordinario”, te hace recobrar tu confianza en el servicio. El martes de la semana pasada, me dirigí a Avelino Abreu, con una goma dañada. Las otras tres están prácticamente nuevas por lo que mi intención era comprar la misma goma y reponerla sobre el eje trasero donde correspondía. Ellos son los representantes exclusivos de la marca que utilizo. La joven de la recepción del servicio de gomas me informó que lamentablemente no tenían la goma en existencia. Le pregunté que cuando les llegarían y me dijo que no sabía. Le pedí que investigara con quien pudiera informarle, y quedó de llamarme cuando lo hiciera. Nunca recibí el llamado, así que llamé yo al cabo de dos días. Hablé con otra joven que también me corroboró que no había gomas de la que yo buscaba en existencia. Al cuestionarla de cuándo las estarían recibiendo, su respuesta fue que no sabía, pues ella no maneja eso de las fechas de los furgones; así que no podía informarme. Por lo menos me indicó que intentara en PriceSmart, pues ellos también tienen la marca que buscaba. No la encontré allí tampoco. No me mal interpreten, ambas chicas me trataron con la esperada cordialidad, pero NO resolvieron mi problema.
Volví a llamar el Sábado por la mañana, y entonces Pedro se salió de lo ordinario. Pedro, me dijo: “En efecto no tenemos esa goma en existencia, pero permítame ver si tienen algunas en nuestra sucursal de Santiago. Si la tuviesen podría organizar con ellos para que nos la trajeran en su próximo viaje a Santo Domingo; pero ese transporte es controlado por ellos, no por nosotros.” Me puso en espera para chequear en el sistema si efecto había en Santiago, y en efecto, resolvió que había 8 gomas en existencia. Acto seguido llamó a Santiago para coordinar el traslado de la goma. Cuando volvió a la línea me dijo que en Santiago no podían garantizarle la fecha del traslado, por lo que el preguntó a su supervisora si ellos podían mandar a buscarla, y que le fue autorizado. Eso es lo que se llama sacarle el WOW a un cliente! Es sólo dar un chin más! (Chin… en el argot dominicano = poquito). Me pidió que le llamara el Lunes por la mañana para darle seguimiento al tema. A pesar de que me lo anoté, no logré hacerlo. Y fue más grata aún mi sorpresa, cuando lo llamé el martes por la mañana, y me informó que mi goma ya está en Santo Domingo, y que había sido recibida el mismo Lunes! Las tres personas con las que tuve contacto tuvieron la opción de “dar la milla extra”. Sólo una optó por hacerlo. Así es como se activa el chip de lo EXTRAORDINARIO.

Cuando las personas ORDINARIAS deciden:
poner un poco de esfuerzo EXTRA,
dar un poco de tiempo EXTRA,
ayudar en algo EXTRA,
poner un poco de amor EXTRA,
y dar de si algo EXTRA cada día…
es cuando se convierten en personas EXTRAORDINARIAS!
Pasión es eso que te hace dar la milla EXTRA! Descubre qué es eso que te apasiona y encontrarás la energía y motivación que te lleva de lo ordinario a lo extraordinario.
Y si eres empresario o ejecutivo al mando de un equipo de personas, ayuda a tus colaboradores a dar la milla extra... reconéctalos con sus pasiones y con tu misión!
Dar la milla extra es cuestión de elección!
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